Estructura textual
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Actividad 1

Pulsa sobre cada botón para observar la información sobre tipología textual según su finalidad, modelos y estructura. Además lee unos ejemplos de algunos de ellos.

Commonswiki. 1997, agosto 31) Northern side. Obtenido de: http://en.wikipedia.org/wiki/Gedung_Sate#/media/File:Gedung-Sate-Trees.jpg

Cómo es:

Presenta características seres, objetos y lugares.

Reportajes descripciones literarias, diarios, guías turísticas.

Presentación genérica. Detallismo con orden (temático, espacial y temporal).

ralph repo (2009, Noviembre 6).ñ Men Laden With Tea. Obtenido de: https://www.flickr.com/photos/ralphrepo_photolog/4079837324

Qué ocurre:

Relatan hechos reales o imaginarios.

Cuentos, textos de historias, chistes contados.

Presentación. - Nudo. - Desenlace.

Andes. (2013, Marzo 26). Una forma particular de enseñar Biología y Química con la netbook. Obtenido de: https://www.flickr.com/photos/ansesgob/8592633056

Qué se defienden:

Defender o debatirlo , o analizar un tema tomando una postura.

Artículos de opinión, discursos , ensayos, análisis comparativo, valoraciones. Entre otros.

Tesis. Cuerpo argumentativo. Reformulación de la tesis o conclusión.

Olnnu(2013, Junio 15). The French-language Petit Larousse is an example of an illustrated dictionary. Obtenido de: http://en.wikipedia.org/wiki/Dictionary#/media/File:Nouveau_Dictionnaire_Larousse_page.JPG

Qué es:

Desarrollan un tema o explican un concepto.

Libros de textos, artículos divulgativos, diccionarios, etc.

Presentación. - Desarrollo. - Resumen/Cierre.

Breck School. (2008, Octubre 11). Debate handshake. Obtenido de: http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Debate_handshake_7276.jpg

Intercambio de información entre interlocutores.

Entrevistas, conversaciones, obras de teatro, etc.

Apertura. - Cuerpo. - Cierre.

Pulsa sobre cada botón para observar el análisis comparativo de los textos. Su finalidad, modelo y estructura.

Tipos de texto:

En el cuento ocurre que se narra una versión diferente de Caperucita Roja. Los hechos imaginarios son relatados por un abuelo a su nieto.

Harke. (1990). Ilustración de Carl Offterdinger del cuento de hadas europeo Caperucita Roja.. Obtenido de: http://es.wikipedia.org/wiki/Cuento_de_hadas#/media/File:Offterdinger_Rotkappchen_(2).jpg

Cuento.

Harke. (1990). Ilustración de Carl Offterdinger del cuento de hadas europeo Caperucita Roja.. Obtenido de: http://es.wikipedia.org/wiki/Cuento_de_hadas#/media/File:Offterdinger_Rotkappchen_(2).jpg

En la obra de teatro los tres personajes intercambian información sobre, las flores de trapo, la guerra y el campo de batalla.

Pinas.(2013, junio 20). Obra de Teatro Canto Esperpéntico.. Obtenido de: https://www.flickr.com/photos/municipiopinas/9138548418/

Obra de teatro.

Pinas.(2013, junio 20). Obra de Teatro Canto Esperpéntico.. Obtenido de: https://www.flickr.com/photos/municipiopinas/9138548418/

El autor defiende la idea de que hay que aprender de los errores y evitar de ese modo el orgullo. Analiza el tema de Castro en su visita a El Vaticano.

Pinas.(1949, OCTUBRE 31). Eleanor Roosevelt y la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Obtenido de: http://es.wikipedia.org/wiki/Declaraci%C3%B3n_Universal_de_los_Derechos_Humanos#/media/File:EleanorRooseveltHumanRights.png

Artículo de opinión.

Pinas.(1949, OCTUBRE 31). Eleanor Roosevelt y la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Obtenido de: http://es.wikipedia.org/wiki/Declaraci%C3%B3n_Universal_de_los_Derechos_Humanos#/media/File:EleanorRooseveltHumanRights.png

Lee los siguiente textos en el material del estudiante y pulsa sobre el menú desplegable para seleccionar el tipo de texto al que corresponde cada uno.

Cinco semanas en globo.
Julio Verne.


El tapiz del Virrey.
Pedro Gómez Valderrama.


El valor de la televisión en la sociedad.




Después de leer los textos propuestos en el Material del estudiante realiza un cuadro comparativo de ellos, teniendo en cuenta: finalidad, modelo y estructura.

Cinco semanas en globo.
Julio Verne.

Finalidad
El tapiz del Virrey.
Pedro Gómez Valderrama.

Modelo
El valor de la televisión en la sociedad.



Estructura
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Ejemplo

A ENREDAR LOS CUENTOS

Gianni Rodari


-Érase una vez una niña que se llamaba Caperucita Amarilla.

-¡No, Roja!

-¡Ah!, sí, Caperucita Roja. Su mamá la llamó y le dijo: “Escucha, Caperucita Verde…”.

-¡Que no, Roja!

-¡Ah!, sí, Roja. “Ve a casa de tía Diomira a llevarle esta piel de patata”.

-No: “Ve a casa de la abuelita a llevarle este pastel”.

-Bien. La niña se fue al bosque y se encontró una jirafa.

-¡Qué lío! Se encontró al lobo, no una jirafa.

-Y el lobo le preguntó: “¿Cuántas son seis por ocho?”

-¡Qué va! El lobo le preguntó: “¿Adónde vas?”.

-Tienes razón. Y Caperucita Negra respondió…

-¡Era Caperucita Roja, Roja, Roja!

-Sí. Y respondió: “Voy al mercado a comprar salsa de tomate”. -¡Qué va!: “Voy a casa de la abuelita, que está enferma, pero no recuerdo el camino”.

-Exacto. Y el caballo dijo…

-¿Qué caballo? Era un lobo.

-Seguro. Y dijo: “Toma el tranvía número setenta y cinco, baja en la plaza de la Catedral, tuerce a la derecha, y encontrarás tres peldaños y una moneda en el suelo; deja los tres peldaños, recoge la moneda y cómprate un chicle”.

-Tú no sabes contar cuentos en absoluto, abuelo. Los enredas todos. Pero no importa, ¿me compras un chicle?

-Bueno, toma la moneda.

Y el abuelo siguió leyendo el periódico. (Rodari, 1962).

+

Ejemplo

ENTRE LA TONTERÍA, EL ODIO Y EL ERROR


En este mundo lleno de complejidades, no nos cansamos de observar absurdas situaciones, que en manos de personajes erráticos conducen a buena parte de la humanidad entre el error y la locura, y parecen no saciarse de sus yerros, y sí regodearse de llevarlos a extremos envueltos en el daño y en la desolación.

El caso que más nos aterra por estos días es el de Cuba: 55 años sosteniendo una doctrina férrea, por parte de los Castro, haciendo padecer a un pueblo por varias generaciones, para descubrir de repente que con su contradictor, los EE.UU., era posible reunirse; que las doctrinas se podían modificar, que los principios no eran absolutos y que todo era susceptible de ser revisado y transformado. ¡Qué horror! ¿Y las víctimas? ¿Y el daño causado?

Pero es más; los mismos Castro proscribieron la Iglesia después de perseguirla y señalarla como la causa de todos los males; y ahora, también de repente, aparece Castro en el Vaticano, sumiso, para suplicarle al Papa que vaya a Cuba y expresarle, arrepentido y devoto, que vuelve al catolicismo.

Ya habíamos tenido una situación semejante, cuando Rusia decide renunciar al comunismo, después de casi medio siglo de persistir en el error de sus doctrinas.

Y en el mundo podemos encontrar infinidad de ejemplos, en donde se generan conceptos que parecen custodiados en arcas blindadas, mientras miles, y tal vez millones de personas sufren y mientras los inspiradores alimentan su vanidad desmedida y perversa. Seguramente aquí nos acordamos también de Venezuela, y cada quien puede agregar un nuevo o viejo caso.

Eduardo Escobar nos recuerda en una estupenda frase que “algunos parecen disfrutar, haciéndose odiar para sentirse víctimas”, y ahí nos encontramos con un problema de trastorno de la personalidad, que si no se corrige a tiempo, adquiere nuevas dimensiones, hasta convertirse en una patología crónica en donde la locura domina e impone.

Mientras la paranoia y la esquizofrenia conduzcan parte del mundo, y mientras la siquiatría no asista esos casos, los conflictos seguirán ahí, las guerras persistirán, los gobernantes malévolos se aferrarán y la humanidad continuará pagando el duro y cruel precio del error.

Bolívar, en el ocaso de su existencia, reconoció su equívoco “El no habernos compuesto con Santander, nos ha perdido a todos”. (Durán Gómez, 2015).

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Ejemplo

PIC-NIC

Fernando Arrabal


SRA. TEPÁN. (A ZEPO.) Y en la trinchera, ¿qué hace usted para distraerse?

ZEPO. Yo, para distraerme, lo que hago es pasarme el tiempo haciendo flores de trapo. Me aburro mucho.

SRA. TEPÁN. ¿Y qué hace usted con las flores?

ZEPO. Antes se las enviaba a mi novia. Pero un día me dijo que ya había llenado el invernadero y la bodega de flores de trapo y que si no me molestaba que le enviara otra cosa, que ya no sabía qué hacer con tanta flor.

SRA. TEPÁN. ¿Y qué hizo usted?

ZEPO. Intenté aprender a hacer otra cosa, pero no pude. Así que seguí haciendo flores de trapo para pasar el tiempo.

SRA. TEPÁN. ¿Y las tira?

ZEPO. No. Ahora les he encontrado una buena utilidad: doy una flor para cada compañero que muere. Así ya sé que, por muchas que haga, nunca daré abasto.

SRA. TEPÁN. Pues ha encontrado una buena solución.

ZEPO. (Tímido.) Sí

ZAPO.-Pues yo me distraigo haciendo jerséis.

SRA. TEPÁN.-Pero, oiga, ¿es que todos los soldados se aburren tanto como usted? ZEPO.-Eso depende de lo que hagan para divertirse.

ZAPO.-En mi lado ocurre lo mismo.

SR. TEPÁN.-Pues entonces podemos hacer una cosa: parar la guerra.

ZEPO.- ¿Cómo?

SR. TEPÁN.-Pues muy sencillo. Tú les dices a todos los soldados de nuestro ejército que los soldados enemigos no quieren hacer la guerra, y usted les dice lo mismo a sus amigos. Y cada uno se vuelve a su casa (Arrabal, s.f).

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Estructura

Érase una vez una niña que se llamaba Caperucita Amarilla.

-¡No, Roja!

-¡Ah!, sí, Caperucita Roja. Su mamá la llamó y le dijo: “Escucha, Caperucita Verde…”.

-¡Que no, Roja!

-¡Qué lío! Se encontró al lobo, no una jirafa.

-Y el lobo le preguntó: “¿Cuántas son seis por ocho?”

-¡Qué va! El lobo le preguntó: “¿Adónde vas?”.

-Tienes razón. Y Caperucita Negra respondió…

-¡Era Caperucita Roja, Roja, Roja!

-Sí. Y respondió: “Voy al mercado a comprar salsa de tomate”. -¡Qué va!: “Voy a casa de la abuelita, que está enferma, pero no recuerdo el camino”.

-Exacto. Y el caballo dijo…

-¿Qué caballo? Era un lobo.

-Seguro. Y dijo: “Toma el tranvía número setenta y cinco, baja en la plaza de la Catedral, tuerce a la derecha, y encontrarás tres peldaños y una moneda en el suelo; deja los tres peldaños, recoge la moneda y cómprate un chicle”.

-Tú no sabes contar cuentos en absoluto, abuelo. Los enredas todos. Pero no importa, ¿me compras un chicle?

-Bueno, toma la moneda.

Y el abuelo siguió leyendo el periódico.

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Estructura

SRA. TEPÁN. (A ZEPO.) Y en la trinchera, ¿qué hace usted para distraerse?

ZEPO. Yo, para distraerme, lo que hago es pasarme el tiempo haciendo flores de trapo. Me aburro mucho.

SRA. TEPÁN. ¿Y qué hace usted con las flores?

ZEPO. Antes se las enviaba a mi novia. Pero un día me dijo que ya había llenado el invernadero y la bodega de flores de trapo y que si no me molestaba que le enviara otra cosa, que ya no sabía qué hacer con tanta flor.

SRA. TEPÁN. ¿Y qué hizo usted?

ZEPO. Intenté aprender a hacer otra cosa, pero no pude. Así que seguí haciendo flores de trapo para pasar el tiempo.

SRA. TEPÁN. ¿Y las tira?

ZEPO. No. Ahora les he encontrado una buena utilidad: doy una flor para cada compañero que muere. Así ya sé que, por muchas que haga, nunca daré abasto.

SRA. TEPÁN. Pues ha encontrado una buena solución.

ZEPO. (Tímido.) Sí

ZAPO.-Pues yo me distraigo haciendo jerséis.

SRA. TEPÁN.-Pero, oiga, ¿es que todos los soldados se aburren tanto como usted? ZEPO.-Eso depende de lo que hagan para divertirse.

ZAPO.-En mi lado ocurre lo mismo.

SR. TEPÁN.-Pues entonces podemos hacer una cosa: parar la guerra.

ZEPO.- ¿Cómo?

SR. TEPÁN.-Pues muy sencillo. Tú les dices a todos los soldados de nuestro ejército que los soldados enemigos no quieren hacer la guerra, y usted les dice lo mismo a sus amigos. Y cada uno se vuelve a su casa (Arrabal, s.f).

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Estructura

En este mundo lleno de complejidades, no nos cansamos de observar absurdas situaciones, que en manos de personajes erráticos conducen a buena parte de la humanidad entre el error y la locura, y parecen no saciarse de sus yerros, y sí regodearse de llevarlos a extremos envueltos en el daño y en la desolación.

El caso que más nos aterra por estos días es el de Cuba: 55 años sosteniendo una doctrina férrea, por parte de los Castro, haciendo padecer a un pueblo por varias generaciones, para descubrir de repente que con su contradictor, los EE.UU., era posible reunirse; que las doctrinas se podían modificar, que los principios no eran absolutos y que todo era susceptible de ser revisado y transformado.

Eduardo Escobar nos recuerda en una estupenda frase que “algunos parecen disfrutar, haciéndose odiar para sentirse víctimas”, y ahí nos encontramos con un problema de trastorno de la personalidad, que si no se corrige a tiempo, adquiere nuevas dimensiones, hasta convertirse en una patología crónica en donde la locura domina e impone.

Mientras la paranoia y la esquizofrenia conduzcan parte del mundo, y mientras la siquiatría no asista esos casos, los conflictos seguirán ahí, las guerras persistirán, los gobernantes malévolos se aferrarán y la humanidad continuará pagando el duro y cruel precio del error.

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Cinco semanas en globo - Julio Verne

Era un hombre de unos cuarenta años, de estatura y constitución normales; el subido color de su semblante ponía en evidencia un temperamento sanguíneo; su expresión era fría, y en sus facciones, que nada tenían de particular, sobresalía una nariz asaz voluminosa, a guisa de bauprés, como para caracterizar al hombre predestinado a los descubrimientos; sus ojos, de mirada muy apacible y más inteligente que audaz, otorgaban un gran encanto a su fisonomía; sus brazos eran largos y sus pies se apoyaban en el suelo con el aplomo propio de los grandes andarines (Cáceres Ramírez, s.f).

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El tapiz del Virrey - Pedro Gómez Valderrama

Cuando el virrey subió a su coche con la virreina, para dirigirse al baile en casa del marqués, el criado mulato se quedó escondido en un rincón del patio, hasta que cesaron todos los ruidos del palacio. Sacó entonces una inmensa llave, y abrió la puerta del salón central. Encendió una antorcha y se situó ante el gran tapiz que adornaba el fondo del salón, y que representaba una hermosa escena de bacantes y caballeros desnudos.

El mulato extendió las manos y acarició el cuerpo de una Diana que se adelantaba sobre el tapiz. Murmuraba en voz baja, hasta que de pronto gritó:
-¡Venid! ¡Danzad!

Los personajes tomaron movimiento y fueron descendiendo al salón. Comenzó la música del sabbat, y la danza de los cuerpos en medio de las antorchas. Ante el mulato, los personajes del tapiz iban cumpliendo el rito de adoración al macho cabrío.

Diana permanecía a su lado, besándole de vez en cuando con golosa codicia.

Después de consumidas las viandas del banquete, vino el momento de la fornicación, hasta que sonó el canto del gallo y los personajes se fueron metiendo uno tras otro en el tejido. Sólo quedaron, trenzados en el suelo, Diana y el mulato, al cual encontraron a la mañana siguiente desnudo y muerto en el suelo con unos desconocidos pámpanos manchados de sangre en la mano. Diana no estaba en el tapiz (Valderrama Gómez, 1984).

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El valor de la televisión en la sociedad

La televisión es un sistema que permite a las personas recibir sonidos e imágenes en movimiento y eso es posible gracias a las ondas. En la actualidad se puede afirmar que en la mayoría de los hogares hay, como mínimo, un televisor. Con el paso de los años se ha convertido en un objeto fundamental y cotidiano que, normalmente, suele presidir el centro del salón y en el que toda la familia se reúne frente a él para ver diferentes programas. Se ha hablado mucho sobre la televisión y los aspectos positivos y negativos. Por ejemplo, Bernice Buresh la ha definido con estas palabras “La televisión puede darnos muchas cosas, salvo tiempo para pensar”. Es por ello que en esta argumentación hablaré sobre el valor de la televisión en la sociedad actual.

En primer lugar hay que decir que la televisión puede verse como algo positivo porque, entre otras cosas, te permite estar informado en todo momento a través de los informativos. Otro aspecto a favor de la televisión es que te permite aprender sobre temas que desconocías gracias a concursos como Saber y ganar.

También destaca la televisión por el hecho de ser un medio de entretenimiento como cuando tenemos la oportunidad de ver una película, nuestra serie favorita o alguna retransmisión deportiva relacionada con el fútbol o el baloncesto, por citar algún ejemplo. Pero no todo lo que rodea el mundo de la televisión es positivo. Por desgracia hay programas como los de cotilleo que aportan muy poco valor al espectador. Otro aspecto negativo es el hecho de que hay gente que se pasa muchas horas frente al televisor y eso crea adicción, o también está el inconveniente por el cual por culpa de la televisión los miembros de una familia hablan muy poco cuando están reunidas en el salón o en la cocina porque están pendientes de lo que pasa en la pantalla de su televisor. En mi caso debo deciros que suelo ver la televisión casi todos los días, pero normalmente es para ver algún informativo y estar al día de lo que pasa en el mundo y algún que otro partido o acontecimiento deportivo.

En resumen, cuando nos referimos a la televisión vemos como hay argumentos a favor y en contra. Pero creo que lo más importante al respecto de la televisión es que cada uno debe ser capaz de hacer un uso responsable de un aparato que nos guste o no forma parte de nuestras vidas. Si conseguimos que las personas se eduquen mirando la televisión, probablemente los beneficios que se obtengan serán mucho mayores que los inconvenientes (Ejemplos de textos, s.f).

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Correcto

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Resulado

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